Si hoy fuera tu último día...


Al escuchar una gran canción en la radio (If Today Was Your Last Day, de Nickelback), me hizo pensar. Es interesante cómo pasamos tanto tiempo corriendo...

Es interesante ver cómo pasamos tanto tiempo corriendo de un lado para otro intentando tenerlo todo hecho. Al final del día caemos rendidos en el sofá. Muchos llevan una lista de cosas por hacer cada día y disfrutan tachando cosas. Yo solía ser así, pero entonces empecé a centrarme en todas las cosas que no había completado y que aún me quedaban por hacer. Me di cuenta de que estaba creando más estrés en mi vida que menos.

Así que olvídate de la lista de tareas pendientes y empieza a centrarte simplemente en tres cosas que quieras hacer al día. Levántate temprano y plantéate cuáles son las tres cosas más importantes que quieres hacer. En mi caso, el 99,9 por ciento de las veces, cuando termina el día, ahora digo: "¡Sí, lo hice! He conseguido mi objetivo". Sintiéndome tranquila y confiada, puedo afrontar otro día.

Esto nos proporciona mucho menos estrés en nuestra vida que una lista interminable de tareas pendientes. Puede que de vez en cuando sigamos escribiendo cosas a largo plazo que nos gustaría completar. Pero acabemos con esa lista de tareas diarias. En su lugar, encontrarás una vida más tranquila y pacífica. Es posible existir dentro de un vórtice de amor y crear más amor y alegría en la vida.

Si hoy fuera tu  último día...

He aquí una lista de cosas que haría si hoy fuera mi último día:

- Darle un beso ardiente a mi pareja antes de que se fuera a trabajar.

- Pasear a los perros porque no hay nada mejor que ver cómo se emocionan cuando dices: “¿Quién quiere salir a pasear?”.

- Darme un baño largo, caliente y lleno de vapor con mucha sal de Epsom y burbujas escuchando música suave.

- Ponerme la ropa interior más sexy de mi cajón (esta es la ocasión especial que he estado esperando) y esos cómodos vaqueros con ese jersey favorito que tengo desde hace 20 años y con el que todavía estoy estupenda.

- Salir a desayunar con mi hermana.

- Ver viejas reposiciones de mis series favoritas.

- Tomar Bloody Marys con mis mejores amigas para comer; porque sí, a veces es divertido ser así de traviesa.

- Sacudir el trasero al ritmo de mi canción favorita.

- Ir a una de esas aplicaciones y programar tarjetas de cumpleaños para que todos las reciban en su próximo cumpleaños. Imagínate la sorpresa que se van a llevar cuando reciban la tarjeta por correo.

- Dormir la siesta con los bebés acurrucados en mi regazo.

- Comerme esas barras de caramelo que normalmente me niego.

- Salir a cenar con la familia a mi restaurante favorito y tomarme un helado después.

- Pasar la noche disfrutando de una película divertida con palomitas y una cerveza sin alcohol.

- Y lo que haría “durante toda la noche” será mi pequeño secreto, ¡porque es divertido tener secretos!

Un gran y sencillo ejercicio de posibilidades

Todas mis cosas favoritas reunidas en un solo día. ¡Qué manera tan exquisita de pasar el último día en este planeta!

Cuando lo pienses un poco, te darás cuenta de que cuando tu vida es muy sencilla, es muy fácil ser feliz. Piensa en cosas significativas si hoy fuera tu último día.

Es un buen ejercicio para hacer de vez en cuando, cada cinco años más o menos. Ayuda a bajar el ritmo y a poner la vida en perspectiva. Y programar esas tarjetas de cumpleaños aunque no sea tu último día es una buena idea. Recuerda, hazlo sencillo: Familia + Amigos + Comida = Felicidad.

¿Qué harías si hoy fuera tu último día?

Autor: Julie Geigle
Fuente: heavensenthealing.us