Síguenos en nuestro canal de WhatsAppKarma es uno de los conceptos más reconocibles en la espiritualidad oriental, pero a menudo también se malinterpreta.
Karma es una palabra sánscrita que significa “acción” o “hecho”. Se hace referencia en muchas religiones como el hinduismo, el budismo, el taoísmo, el sijismo y el jainismo. Y aunque el concepto se presenta de manera diferente en cada una de estas escuelas de pensamiento, el significado central sigue siendo el mismo.
La ley del Karma establece que para cada acción, hay un efecto correspondiente. No es solo con acciones sino también con pensamientos e intenciones. En ciertas creencias religiosas sobre la reencarnación, es el karma el que gobierna al yo en el proceso de renacimiento. Así que buenas obras = un efecto positivo en la próxima vida. Mientras que las malas acciones = un efecto negativo en la próxima vida.
Pero dado que las acciones no siempre son buenas o malas, el karma también puede ser ambas cosas.
Por ejemplo, si ayudas a alguien a sacar sus compras porque ves que tienen dificultades y solo quieres ayudar, eso es un buen karma.
Pero si ves que su auto es caro y luego les pides dinero, la intención pura de tu primera escritura cambió.
También existe la posibilidad de buenas intenciones y malas acciones: como querer ayudar a un miembro de la familia que lo necesita, pero robar dinero para dárselo (lo que aún resultaría en mal Karma).
“Date cuenta de que todo se conecta con todo lo demás”. ~ Leonardo Da Vinci
El karma es un proceso continuo e involucra no solo el pasado sino también el presente y el futuro. Tus pensamientos en tus vidas pasadas tienen un efecto en tu vida presente y tus acciones presentes tienen un efecto en tu vida futura. Tus acciones actuales también pueden tener un impacto en tu vida actual.
El karma explica por qué le pasan cosas malas a la gente buena. La persona puede no tener un hueso malo en su cuerpo en el presente y sufrir eventos desafortunados, no debido a sus acciones presentes, sino a las acciones que realizó en una vida anterior.
Pero no te preocupes porque cuando alguien sufre de mal Karma, no significa que ese ya sea su destino. En el hinduismo, el karma malo puede compensarse haciendo buenas obras. El karma también se puede compensar con las acciones presentes, por lo que si tuviste un buen karma de una vida pasada, si haces algo malo, se puede compensar.
Las 12 leyes del karma
Existen las 12 leyes básicas y simples que rigen el Karma. Al seguirlos regularmente, puedes atraer buen Karma a tu vida.
Ley de Causa y Efecto - Quieres felicidad, da felicidad.
Ley de la Creación - Esfuérzate por crear.
Ley de la Humildad - Aceptar la realidad, trae cambios.
Ley del Crecimiento - Sé el cambio que quieres ver en el mundo.
Ley de la Responsabilidad - Toma posesión de tus acciones.
Ley de Conexión - El Karma Presente cura el Karma anterior.
Ley del enfoque: Concéntrate en tu objetivo único.
Ley de Dar y Hospitalidad - Ser desinteresado y dar a los demás.
Ley del Aquí y Ahora - Vivir el momento presente.
Ley del Cambio - Aprender a cambiar nuestras acciones
Ley de Paciencia y Recompensa - Se paciente y persistente
Ley de Importancia e Inspiración - Contribuya, no importa
lo que suceda
Sigue estas leyes y te encontrarás atrayendo buen Karma: tanto en el presente como en el futuro.
Cuando comprendes la causa y el efecto de tus pensamientos y acciones, puedes ir hacia adentro y conectarte aún más con quien eres. Y cuando todos podemos conectarnos internamente de esa manera, también podemos conectarnos mejor entre nosotros. ¡El karma hace que el mundo gire!
¿Cómo afectan nuestras vidas las 12 leyes del karma?
Entonces, ¿por qué debería importarnos el karma? La respuesta corta es que afecta nuestras vidas y la de los demás de manera importante, ya sea que seamos conscientes de ello o no. “Comprender el concepto de lo que haces vuelve a ti, nos ayuda a aspirar a actuar desde un lugar de alineación y con nosotros mismos y con los demás”.
Lo bueno es que estamos creando nuestro propio karma a medida que vivimos nuestras vidas, tanto bueno como malo. Para aprovechar el poder de las 12 leyes del karma, debemos crear intencionalmente un buen karma haciendo contribuciones positivas al mundo desde un punto de vista positivo. lugar de sinceridad. En otras palabras, haz cosas buenas porque te hace sentir bien, no solo porque estás buscando buena fortuna a cambio.
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