¿Te ha pasado alguna vez que sientes que estás haciendo todo bien, eligiendo hábitos sanos, tomando decisiones saludables, sin embargo, tu salud no está mejorando?
Ese vientre molesto simplemente se niega a ir. O esa fatiga, que esperabas que desapareciera, se te pega como un adhesivo celofán
Todos hemos estado allí, ¿verdad? Cuando parece que no importa cuánto intentes arreglar las cosas, ¡siempre te sale mal! Pero, ¿cuál podría ser el problema?
Bueno, a veces, sin saberlo, mientras tratamos de hacer lo correcto, ignoramos las cosas más sutiles, las aparentemente más pequeñas, que en realidad se están convirtiendo en los mayores obstáculos para una persona sana y en forma.
Ese vientre molesto simplemente se niega a ir. O esa fatiga, que esperabas que desapareciera, se te pega como un adhesivo celofán
Todos hemos estado allí, ¿verdad? Cuando parece que no importa cuánto intentes arreglar las cosas, ¡siempre te sale mal! Pero, ¿cuál podría ser el problema?
Bueno, a veces, sin saberlo, mientras tratamos de hacer lo correcto, ignoramos las cosas más sutiles, las aparentemente más pequeñas, que en realidad se están convirtiendo en los mayores obstáculos para una persona sana y en forma.
Descubre cuáles podrían ser esos hábitos que sin saberlo pueden estar saboteando tu trabajo.
1. Racionar tus alimentos en recipientes de plástico
El racionamiento de comida es una buena idea. Ya que has planeado previamente la cantidad que vas a comer, las posibilidades de comer en exceso casi se eliminan. Pero el mayor error que podría cometer es almacenar la comida en contenedores hechos de plástico.
Se sabe que la mayoría de los envases de plástico contienen BPA, una sustancia química que daña tu sistema e impidiendo la pérdida de peso. Opta por recipientes de vidrio y cerámica en su lugar. Estos son fáciles de usar y limpios, además de ser absolutamente saludables.
Se sabe que la mayoría de los envases de plástico contienen BPA, una sustancia química que daña tu sistema e impidiendo la pérdida de peso. Opta por recipientes de vidrio y cerámica en su lugar. Estos son fáciles de usar y limpios, además de ser absolutamente saludables.
2. Ser estricto cuando se trata de su plan de salud y bienestar
¿No te ha sucedido que no pudiste llegar al gimnasio y sigues culpándote por ser indisciplinado? ¿O esa vez en la que tú amigo logró tentarte para que tengas ese pastel y no pudiste perdonarte por ser tan voluble y débil?
Los expertos dicen que esa actitud solo te hará daño. Recompénsese de vez en cuando y verá lo rápido que los resultados pasan de ser simplemente promedio a absolutamente impresionantes.
3. Juzgando tus logros solo por la apariencia (o balanza)
Muchos de nosotros pensamos que nuestros planes de salud solo funcionan cuando vemos los resultados en el espejo o en la balanza. La verdad es que estos dos son probablemente los peores jueces en lo que respecta a la salud y la belleza real. Entonces, la próxima vez que sientas la tentación de juzgar tu reflejo en el espejo, retrocede un paso y mira lo positivo. ¡Estoy seguro de que encontrarás muchos!
4. Iniciar el día negativamente
Si te despiertas pensando que no podrás seguir tu régimen de salud, probablemente no podrás hacerlo. Hay mucha verdad en el dicho de que "las batallas primero se pelean en la cabeza". Si las puedes ganar en tu cabeza, puedes ganarla en la vida real. Entonces, deja de subestimarte a ti mism@, y en lugar de despertarte pensando que vas a fallar de todos modos, intenta hacer lo contrario. Los resultados te sorprenderán.
5. Consumir calorías a través de las bebidas
Muchos de nosotros somos muy buenos para contar las calorías cuando se trata de alimentos sólidos, pero nos relajamos cuando se trata de bebidas. Sin darnos cuenta, a veces terminamos bebiendo pura azúcar, que es muy perjudicial para nuestra salud. La próxima vez que sienta la tentación de pedir ese café frío o un batido, pregúntate si podría prescindir de ellos.
6. Ingerir bebidas 'dietéticas'
Estos no son mejores que sus contrapartes azucarados y es mejor evitarlos. En lugar de poner sustancias químicas innecesarias en tu cuerpo, solo toma agua. ¡Verás lo fresco e hidratado que te sientes!
7. Dormir con tus aparatos
Hay muchos estudios que apuntan al hecho de que la electrónica interrumpe tu patrón de sueño y las luces de pitido obstaculizan tu sueño también. Por no mencionar la radiación dañina y las vibraciones que emiten. Lo mejor es apagarlos antes de dormir. Verás cuán tranquilo será tu sueño.
8. No dormir lo suficiente
Este es probablemente el peor de todos. Asegúrate siempre que tu cuerpo duerma al menos 8 horas cada noche. Solo entonces podrá despertarse renovad@ y rejuvenecid@ a la mañana siguiente para enfrentar los desafíos del día.
9. Saltarse las comidas, especialmente el desayuno
Muchos de nosotros pensamos que omitir las comidas ayuda a mantener baja la cantidad de calorías. Esto no es verdad. Cuando te saltas una comida, tiendes a comer en exceso la próxima vez que estás comiendo. Además, después de largos períodos de ayuno (como mientras duerme), tu cuerpo entra en estado de shock pensando que está muerto de hambre. Esto hace que comience a absorber todas las grasas en el cuerpo, ya que teme que haya más horas de períodos sin comer.
👍 COMPARTE lo positivo {+} en tu red social favorita 💡 ¡Asegúrate de guardarlo en tu tablero de Pinterest! Aprende a expandir tu consciencia y observar los cambios positivos en tu vida! Si llegaste hasta aquí, muchas gracias por leernos.