Atrae el amor y la prosperidad con la ayuda del Feng Shui 💗


Disfruta del amor aplicando la antigua técnica oriental.

Está por todas partes: la cocina sushi japonesa, los baños de vapor con masajes de piedras calientes, los tempura y las artes marciales, el Yoga y las disciplinas de la mente, el Tai Chi, la danza oriental y mucho más.

La interacción cada vez más intensa entre el Oriente y Occidente ha puesto de moda toda una filosofía de vida. Entre esas disciplinas un lugar predominante lo ocupa el Feng shui un conocimiento milenario originado en China.

Su minimalismo, la tendencia a simplificar la vida y volverla armoniosa y bella en todo momento. Cualquier objeto, bien colocado, en armonía, se vuelve bello inmediatamente.

Uno de los aspectos principales del Feng Shui está dado en la idea de opuestos sin oposición, lo que se llama el yin y el yang. O sea, el polo negativo "en este caso no quiere decir que sea malo, sino que es el opuesto- y el positivo.

De esa manera cada acción tiene su reacción y viceversa. Constantemente vemos la manifestación del yin y del yang en todo lo que nos rodea y en la vida misma.

Ejemplo, el yin es un elemento femenino y como tal receptivo, el yang masculino y por tanto activo. Así vemos que la oscuridad es yin mientras la luz es yang "pero observa que la oscuridad no es mala puesto que en el vientre materno no hay luz y de ahí surge la vida.


Cuando tomamos aire es yang "penetración, masculino- cuando lo expulsamos al respirar es yin. Los latidos del corazón son yin y yang, todo lo podemos entender de esa manera:
lo alto y lo bajo, lo suave y lo duro, lo áspero y lo liso, abajo y arriba, la noche y el día, y así sucesivamente.

Aunque podría pensarse que el sentimiento contrario del amor es el odio, no se considera así.

Sino más bien se considera al egoísmo como su opuesto ya que el amor se entrega, y el egoísmo lo quiere todo para sí sin importarle nada y como consecuencia surgen los odios, ambiciones, guerras y calamidades. Las personas egoístas, no saben amar.

El Feng Shui intenta encontrar el equilibrio y aportar una vibración muy positiva a todo lo que haces.

Puedes aplicarlo para armonizar tu vida, y al hacerlo atraer equilibrio, prosperidad y sobre todo amor. En tus manos está transformar tu realidad para acercar a ti todo lo bueno y en este caso el amor y la prosperidad.

Si quieres que tu casa atraiga el amor el Feng Shui enseña que no debe estar “cargada” ni atiborrada de muebles o excesos de adornos.

Los espacios abiertos, los colores serenos y la disposición de muebles y enseres en una viviendo convierten a “una casa” en “un hogar” que es algo más íntimo, protector, amoroso.

Si no puedes partir de cero a la hora de diseñar tu casa entonces harás importantes transformaciones. Todo se puede potenciar o neutralizar con colores, materiales y formas para encontrar el equilibrio entre el yin y el yang.

¿Qué hacer con ese dormitorio?

La cama siempre se sitúa en el centro de la habitación y la colocación de un baúl o una alfombra como protectores a los pies de la cama se considera indispensable en el Feng Shui y el conjunto energético que invita al descanso, al sueño, o a la intimidad y el amor en su momento.

Evita siempre los colores chillones, el blanco es mejor para el baño, y las habitaciones de los niños, y en otras parte de la casa los tonos de color tierra, suaves, en la cocina, y comedor, combinándolos con cuadros que se integren en el conjunto.

Manteniendo el equilibrio y la armonía en todo lo que hacemos denotamos seguridad y auto confianza, cualidades indispensables para atraer a nuestro lado los sentimientos más nobles y ¿qué más noble que el amor?

Con estos simples consejos acentuarás tu espacio y lo convertirás en ese centro donde impere la armonía familiar, la alegría, y el amor.
Las entradas deben de ser grandes, espaciosas y con luz, un espacio que invite a entrar. Una vez dentro de la casa la ambientación es fundamental. Nada de muebles enormes que impidan caminar o mesas en el centro de la sala con la que constantemente se esté tropezando.

Asimismo, en la medida de lo posible y según el espacio que tengamos, el televisor debe estar aparte del lugar de estar. Si lo tenemos como centro entonces no habrá conversación posible, todo será “mirar la tele”.


Esa visita que llega a tu casa posiblemente necesite usar el baño y por tanto debes decorarlo con colores alegres, pintura blanca en las paredes que denote limpieza y evita los olores fuertes de desinfectantes como el cloro, amoniaco y productos similares.

Una vez que hayas limpiado tu baño aromatízalo suavemente con velas de olor, o yerbas como la albahaca o la menta de suave aroma.

Quien entre a tu baño debe sentirse bien y darse cuenta que eres una persona detallista, elegante y limpia.

No importa si seas hombre o mujer, la forma en que tengas dispuestos tus objetos de limpieza y aseo personal indicarán claramente el tipo de gente que eres y revelará aspectos íntimos de tu personalidad, aquellos que atraen el amor y la admiración.

Para que tu visitante se sienta cómodo evita mesitas con esquinas puntiagudas o puestas en el medio de un paso.

Los pasillos alargados se suavizan con espejos y plantas en una esquina, los sofás y butacones no deben estar dando la espalda a la puerta principal porque eso crea una sensación de inseguridad.
La cocina impecable, con los enseres bien guardados. No hay que estarlos exhibiendo solo se sacan cuando se van a usar.

A menos que tengas un gran espacio y entonces estés decorándola con artículo que denoten calidez, una atmósfera familiar y acogedora y sensación de limpieza unida a la de una buena alimentación: frutas que adornan, recipientes con aceite y yerbas aromáticas, todo lo que inspire y alegre.

Autor: Profesor Zellagro
Fuente: Univision.com