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La sabiduría y la inteligencia son dos cosas diferentes. Aunque los autores en general no se logran poner de acuerdo con respecto a que es cada una, yo defino la inteligencia como el uso de los procesos mentales aplicados a la lógica (atención, percepción, concentración, memoria, conciencia, etc.) y la definición de sabiduría se resume de manera sencilla en 3 aspectos diferentes:
Astucia, conocimiento cristalizado y sabiduría divina (definido en el libro de proverbios de la Biblia).
Para obtener sabiduría en los 3 ángulos que defino anteriormente puedes poner en práctica los siguientes consejos.
- Aprende a escuchar consejos: ¿qué consejos voy a escuchar?¿todos? Sí, pero solamente tomarás los que provengan de una fuente confiable, segura, experimentada y que cuadre con el problema en el que te encuentras. Por ejemplo, un mal consejo podría provenir de una persona que tiene menos experiencia que tu o que jamás ha vivido el problema que tienes. Un buen consejo puede venir de alguien mayor, un tutor o un consejero que es experto en el área.
- Elige tus amistades cuidadosamente: "El que anda con lobos a aullar se enseña" y "El que anda con sabios, sabio será" Dicen muchas personas, que si quieres saber ¿quién serás? dentro de unos 10 años, que solamente necesitas mirar a las 7 personas más cercanas a ti y entonces podrás saber en quién te convertirás. Uno puede ser amable con todos y tener una relación superficialmente agradable con todo mundo, pero para intimar, lo mejor es juntarse con gente que te llevará a ser mejor persona.
- Lee libros: El pueblo muere por ignorancia, si no te gusta leer, debes disciplinarte a hacerlo y encontrar libros que sean de tu interés. Después poco a poco comenzarás a poder manejar todo tipo de lecturas. La lectura es el pasaporte a abrir tu mente a otros mundos, experiencias y a reducir tu número de errores de forma drástica.
- Adquiere valores y principios: Sin valores y principios no existe la sabiduría verdadera y estos provienen única y exclusivamente de los fundamentos morales establecidos en el hombre. El mejor libro para adquirir principios y valores que se vuelvan una fuerte convicción se encuentra en los proverbios de Salomón que fue escrito para jóvenes de la realeza de su tiempo, pero resume completamente todo código de conducta agradable Dios y toda forma de éxito basado en buenas decisiones. No hay libro que contenga mejores consejos de sabiduría que los Proverbios de Salomón.
- Aprende de tus errores: Si te has equivocado, no te angusties, ni tampoco te castigues, todos nos equivocamos, el punto principal se encuentra en sacarle provecho a los errores. Sólo el necio es aquel que puede tropezar con la misma piedra una y otra vez, sin hacer nada al respecto. Cada vez que cometas errores, analiza e intenta reflexionar para sacarle provecho al asunto.
- Aprende de los errores de los demás: Alguien alguna vez dijo "nadie experimenta en cabeza ajena", pues yo creo que sólo el necio tiene que experimentar lo que es un obvio error para los demás para vivirlo él mismo. Una persona sabia, puede observar la vida de los demás, analizar sus trasfondos y poder darse cuenta de los errores que han cometido para no cometerlos uno mismo.
- Pide a Dios sabiduría: En la Biblia, Dios dice que si alguien le pide sabiduría, él la dará abundantemente y sin reproche, la sabiduría está disponible como un regalo para todos. El que busca encuentra, el que toca se le abre y el que llama se le escuchará. Si quieres y necesitas unas dosis de sabiduría de lo alto, sólo tienes que pedirla.
- Mantén una disposición a aprender: Sólo el que es necio y arrogante cree saberlo todo, uno siempre debe mantener controlado el ego y detenerse a observar, detenerse a pensar y siempre estar dispuesto a aprender nuevas cosas, no importa cuál sea la situación.
- Dar a los demás: siempre es mejor dar que recibir y cuando uno da a los demás, uno recibe a cambio. Cuando tu enseñas a otras personas lo que has aprendido, recibirás retro-alimentación propia o de la otra persona y crecerás en experiencia y conocimiento.
- Escucha a los demás: Cuando te cuenten problemas, cuando quieran des-ahogarse o cuando quieran hablar de algún asunto. Aunque no tengas las respuestas, siempre que escuchas otras historias, aprenderás de ellas, pues son experiencias ajenas que pueden enriquecer tu vida.
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