El ego es un socio silencioso y las más de las veces dominante
-C.Hightower.
|
Ejemplos de comportamientos en el lado oscuro
• Discusiones y peleas. Si hay algo que te puede garantizar vivir en el lado oscuro, lleno de angustia y ansiedad, es una discusión o un pleito. Siempre en tu vida, ¡siempre!, hay otra opción, y tú podrás elegir entre discutir o no. La raíz de este comportamiento es la necesidad de ganar, la necesidad de demostrar que uno tiene la razón, ego puro moviéndose en sus linderos de oscuridad. Todo pleito, toda discusión, favorece la conciencia de separación e incrementa un estado de ansiedad que puede volverse crónico si no se hace algo para salir de ahí. Cuando llega el momento en que uno no necesita demostrar que se tiene la razón, cuando uno ya no necesita ganar, se acerca uno a la puerta que nos lleva a la luz.
• Competencias y comparaciones. Cada vez que te compares con alguien para medir tu propio valor, estás a merced de tu ego, tu yo falso. Es cuando aceptas la terriblemente errónea idea de que Dios tiene preferidos. El ego siempre te estará bombardeando con la ansiedad de necesitar ganar, con sus palabras a tu oído como: " ... Tú eres más guapo que ella o él, tú eres más inteligente que esa otra persona, tú eres más espiritual que ese o esa otra ... , tienes que hacer valer tu superioridad demostrándole la verdad de quién está arriba de quién. Eres el mejor y lo sabes, entonces demuéstralo, así podrás experimentar tu éxito". Éstas son clásicas frases del ego queriéndote arrebatar la paz que en verdad buscas.
• Lucha y persecución. Arquetípicamente hablando, todas las escenas donde hay lucha y persecución, tanto en cine como en televisión, resuenan en alguna parte de nosotros. Ése es gran parte del éxito de tu ego. El ego ha existido desde siempre. Por eso, cada vez que vayas luchando por perseguir ornatos de éxito, símbolos de éxito, imagen de éxito, te estarás sumergiendo más y más en el lado oscuro de tu ser, en tu yo falso. Cada vez que quieras demostrar que eres muy diferente a los demás, seguirás en esa lucha y persecución de lo que te han hecho creer que es el éxito. Cuando logres esta imagen del éxito, es muy posible que te acompañe un vacío interior que se hará cada vez más grande conforme más persigues los símbolos de estatus. El ego no quiere verte satisfecho nunca, porque entonces ahí podrías conocer la paz y encontrarte con Dios en tu interior. El ego siempre te dirá que tienes que correr y, si puedes, más aprisa cada vez. Lo que no te suele decir el ego es que el final de esa carrera te está esperando un ataúd muy oscuro.
• Preocupación por ganar. Cuanto más te preocupes, menos paz puedes experimentar. El ego parece que está programado para sembrar preocupaciones en nosotros. Es gran parte de su papel. Te tratará de persuadir con ideas tales como la posibilidad de perder tu empleo, sufrir un accidente, enfermarte, perder a tu pareja, preocuparte por perder tu belleza envejeciendo, hasta incluso preocuparte por ser sujeto de investigación por Hacienda. Pronto, cuando decidas estar del lado de la luz, verás cómo las preocupaciones se desvanecen y te sorprenderá darte cuenta de que muchas de las cosas que te preocupan, nunca llegan a suceder. Sin embargo, el ego insistirá en que te preocupes por el futuro, siempre. El ego crece con este tipo de pensamientos centrados en la preocupación.
• Necesitar que la gente se fije en ti. Si diario te arreglas no por el gusto de sentirte bien contigo mismo(a) sino por la necesidad de que la gente se fije en ti, estás a merced del ego. Tu ego tratará de convencerte de algo: " ... si no se fijan en ti, algo está mal en tu persona, así demuestras que eres inferior. Mejor pregúntale a los demás qué opinan de ti ... ". La inseguridad en uno mismo crece gracias al ego. Con este tipo de pensamientos la paz es un lugar de fantasía inexistente para ti. El ego te convencerá de que hagas hasta lo imposible para que los demás se fijen en ti, desde cirugías innecesarias hasta llanto y depresión que te suban al escenario. He aprendido en mi vida que cuando "necesito" la aprobación de alguien, siempre surge la ansiedad y así me alejo de la paz.
• Necesidad de reconocimiento por alguien en específico. En este tema fui experto. Durante mucho tiempo necesité el reconocimiento de alguien en especial cada vez que tenía determinado éxito. Ésa fue la mayor garantía para conferirle poder sobre mis emociones a esa otra persona. Los resultados siempre fueron funestos. Cada vez que anhelas, que necesitas, que alguien te reconozca algo, estás a merced de tu ego, y la vulnerabilidad de tus emociones tú mismo la creas y podrás acabar en un lugar verdaderamente oscuro y solo. El ego quiere que le aplaudan, que lo alaben, el ego tiene la plena certeza de que merece el reconocimiento en virtud de que ganó. Y el ego vuelve a ganar favoreciendo la separación. Esta actitud genera una gran ansiedad que nunca termina porque, aunque sea merecida la reprimenda, en el fondo permanecerá el deseo de recibir el reconocimiento, pero ahora la otra persona lastimada menos lo podrá dar. Se cierra el Círculo vicioso y aumenta la ansiedad y la separación.
• Alegrarse por los problemas de los demás. Si te alegras cada vez que te enteras que los demás tienen problemas, en especial aquellos que juzgas como tus enemigos, estás a plena merced del ego. Ésta es una de las maneras más eficientes que tiene el ego para hacemos sentir desconectados de los demás y favorecer la conciencia de separación. Ocuparse e invertir tiempo hablando de las desdichas de los demás es una de las maneras más debilitantes para tu ser, tanto mental como físico. El ego con su necesidad de ganar, se regocija hablando de las derrotas de los demás, y es que lo ve como parte de su triunfo. Hoy mi invitación es a que con una Nueva Conciencia te enteres de que hay un verdadero éxito en la vida y que de la forma en que se nos enseñó no se obtiene.
Sugerencias para evolucionar pasando al lado de la luz
Aquí quiero compartirte algunas ideas que te pueden ayudar a que, una vez que ya viste la puerta entendiendo todo lo anterior, ahora puedas elegir evolucionar como persona y entrar a la luz.
• Opta por la paz. Cada vez que elijas hacer algo o decir algo, pregúntate con tu mayor estado de conciencia posible si eso te traerá paz o ansiedad, y opta por lo primero.
• Opta por la paz. Cada vez que elijas hacer algo o decir algo, pregúntate con tu mayor estado de conciencia posible si eso te traerá paz o ansiedad, y opta por lo primero.
• Comparte tu paz, pero recuerda necesitas tenerla para darla. No puedes dar lo que no tienes. Opta por tu paz interior en cada uno de tus actos y ofrece esta Nueva Conciencia de paz en todos los ámbitos que te sean posibles. Pronto verás cómo la gente te consulta para preguntarte lo mejor que les convenga. Ya empezaron a identificarte como fuente de paz. Recomiéndales lo que tú mismo(a) has aprendido. Nada se compara con la paz.
• En una discusión, elige la amabilidad. Cuando en un pleito, tu ego te ofrezca la tentación de demostrar que tú ganas al saber que tienes la razón, opta no por demostrar que la tienes, opta por ser amable y no decir nada. Verás la sensación de paz que te empieza a invadir. Incluso la otra persona dejará de pelear porque ya no tiene que defenderse, ya no siente tu hostilidad y el pleito termina en ese mismo momento.
• Comprende que siempre se te reconoce y que incluso así no lo necesitas. Cuando hagas algo que crees merece reconocimiento, siempre habrá alguien que te lo reconozca desde el fondo de su corazón, pero quizás estabas tan empecinado en que alguien en específico te lo reconociera, que no alcanzaste a ver a un corazón noble que lo estaba haciendo desde antes. Siempre habrá alguien que reconocerá tu trabajo. Siempre, lo veas o no. Descansa en esta idea. Y conforme vayas evolucionando en tu dimensión corno persona, te darás cuenta de que cada vez requieres menos reconocimiento. Te recomiendo que hagas las cosas por el placer de hacerlas y por la dicha de saber que le estás sirviendo a alguien. Hasta ahí. Esto te liberará y te abrirá paso hacia la luz.
• No juzgues. De mi maestro Dyer aprendí que "El enjuiciamiento y la paz son antitéticos”. No puede concebir el vivir enjuiciando a los demás y una sensación de paz interior. Aquí, al principio, tienes que hacer un esfuerzo por mirar a los demás sin condenarlos por nada. Durante años hemos sido acostumbrados a lo contrario, pero hoy se nos ofrece una Nueva Conciencia corno opción y te invito a que la pruebes. Hay tanta paz ahí.
• Date el regalo de estar un rato en silencio "todos los días". Esto genera una enorme paz. Date tan sólo un momento de silencio diariamente y comprenderás lo que te estoy diciendo aquí. Cuando empieces a disfrutar regularmente de estos momentos no los querrás cambiar por nada y es que ahí empezarás a sentir paz.
• Ora. He aprendido que la forma más clara de ves cerrando los ojos. Cada vez que abres tus ojos, el ego te tienta con lo que observas en el mundo material que percibes al abrirlos, pero cada vez que los cierras, se abre la opción de percibir tu interior y saber que todos tenemos un lugar en nuestro interior donde mora la paz y la armonía. Nadie puede llegar ahí salvo tú. Es parte de tu verdadera seguridad, de tu verdadero éxito en la vida. Cuando aprendí a orar, supe que podía pedir la paz en cualquier momento y en ese mismísimo instante se materializaba en mí. Me consta. Todavía me emociona recordar algún momento en que me sentí amenazado y cuando dije con fe "puedo elegir la paz en lugar de esto", al instante sonó en mi computadora la señal de que recibía correo electrónico abrí mis ojos y se trataba de una oración divina que alguien me enviaba sólo por el placer de compartírmela. La oración iniciaba diciendo "No te preocupes, déjalo todo en mis manos y reposa en mi Firma: Jesús". Este tipo de experiencias las he vivido en varias ocasiones. Entre bromas, he llegado a sospechar que en el cielo haya Internet.
Tu yo espiritual siempre te alentará a buscar la paz. Te invito a que sigas esta guía que llevas dentro. Es maravilloso vivir gran parte de nuestra vida en esta Nueva Conciencia, cada vez más conforme lo desees en verdad. Tu espíritu deberá estar a cargo de tu vida para que experimentes la paz de la que aquí te hablo. Si la logras, el ego querrá entrometerse de alguna otra manera; si entras a la luz, el ego querrá traerte de vuelta a la oscuridad. Tu ego siempre intentará detener tu evolución. El ego tratará de persuadirte haciéndote creer que todo lo que te he dicho aquí es mentira, y si lo llegas a experimentar, tratará de hacerte creer que también es mentira y sólo es algo pasajero. Entonces, llegó el momento de aclarar más el camino, seguir buscando la luz y cruzar esa puerta yendo ...
Tu yo espiritual siempre te alentará a buscar la paz. Te invito a que sigas esta guía que llevas dentro. Es maravilloso vivir gran parte de nuestra vida en esta Nueva Conciencia, cada vez más conforme lo desees en verdad. Tu espíritu deberá estar a cargo de tu vida para que experimentes la paz de la que aquí te hablo. Si la logras, el ego querrá entrometerse de alguna otra manera; si entras a la luz, el ego querrá traerte de vuelta a la oscuridad. Tu ego siempre intentará detener tu evolución. El ego tratará de persuadirte haciéndote creer que todo lo que te he dicho aquí es mentira, y si lo llegas a experimentar, tratará de hacerte creer que también es mentira y sólo es algo pasajero. Entonces, llegó el momento de aclarar más el camino, seguir buscando la luz y cruzar esa puerta yendo ...
DE LA MENTIRA A LA VERDAD
Claro que yo he mentido. Y no me importa si los demás también, sólo me atrapo en la conciencia de mí mismo y hoy me impresiona lo que fui capaz de decir y hacer en alguna etapa de mi vida, pero a la vez me alegro grandemente de la oportunidad que se me ha brindado de pasar al Iado de la luz, cruzar esa puerta y poder vivir cada vez más en un enorme júbilo y continua sensación de paz al saberme caminando por mi sendero espiritual viviendo en mi verdad, guste o no a los demás.
Un verdadero compromiso con la verdad es el gran paso que tú y yo daremos a lo largo de nuestro estudio en este capítulo. Y ese compromiso es un enorme progreso que juntos viviremos para dominar a nuestro ego, el cual crece mediante el engaño y la falsedad. Hoy he comprendido y he sentido que vivir en la verdad es una poderosa manera de abrazar a Dios y conocerlo. Cada mentira, cada engaño, cada falta de autenticidad es alejamos de este maravilloso encuentro. Algo que me ayudó tremendamente para transitar por este hermoso sendero espiritual es saber a ciencia cierta que Dios no tiene preferidos. Yo creo firmemente que el verdadero Dios nos acoge a todos por igual, sea cual sea nuestra condición socioeconómica, raza, credo, identidad sexual, nivel cultural, oficio, nacionalidad o color. Entonces, si es así, ¿qué caso tiene mentir? Hoy he aprendido que no mentimos a quien nos acepta incondicionalmente, tal vez porque no es necesario; sin embargo a aquel que no nos acepta tal como somos, a ése precisamente, es a quien más le mentimos. Mientras que alguien quiera que las cosas sean de determinada manera, el ego se impone; luego el otro para darle gusto, miente, el ego sigue creciendo; luego de la mentira que siempre se descubre, el primero se siente traicionado y quiere buscar justicia (que es una poderosa manera de maquillar la venganza) y así el ego sigue creciendo; luego el otro para defender su punto de vista quizá mienta otra vez, el ego ya es avasallante, y así sucesivamente. Se crea uno de los más grandes círculos viciosos que nos alejan del camino espiritual. Resulta irónico: buscamos paz donde no existe. Quizás ésa sea mi mejor manera de definir lo que es una mentira, intentar sentir paz y tranquilidad donde no existen en absoluto.
Mi invitación a una Nueva Conciencia en este capítulo supondrá un gran reto para ti y para mí por tantos años a los que hemos estado acostumbrados a llevar nuestra vida guiada por el ego. Sin embargo, está garantizado que la búsqueda espiritual se encuentra en la verdad. Te recomiendo lo que a muchos nos ha servido: comienza por mirar con honestidad y sin miedo tú verdadero yo, ese que solemos esconder bajo la "imagen del éxito", ese que está bajo la superficie que busca aceptación, ese que eres en verdad.
Nadie lleva un monstruo en su interior. Lo mejor de ti lo llevas dentro y lo monstruoso bien podría ser sólo la superficialidad de lo que presentas a los demás. Cree que la más profunda identidad, incluso de un criminal es su belleza espiritual. Sólo es cuestión de ir a ella y eliminar la superficialidad para que aflore la hermosura del interior. Miguel Ángel Buonaroti al esculpir su hermosa obra "El David", dijo que éste ya se encontraba dentro del mármol, y que sólo le quitó lo que le sobraba. Quizás así pase con nosotros, muy dentro de nuestra fría y marmórea superficialidad se encuentre la belleza de nuestro verdadero yo. Quitando la mentira surge la verdad, ergo, quitando al ego surge nuestro espíritu, y ése siempre es agradable a los ojos de toda la creación.
En los últimos años de mi vida he trabajado con mucha atención en eliminar lo que hoy identifico como mis mentiras. Mientras las cometía, nunca quise dañar a alguien o algo, simplemente fue el modelo que aprendí para salir de un apuro o lograr mis oscuras intenciones. Durante mucho tiempo aprendí a escuchar a mi ego quien siempre me invitó a mentir para ocultar mis propias debilidades o incapacidades. Así siempre suceden los dictados del ego. Cuando decidí abrir la puerta que me llevaba al Iado de la luz, me sorprendí de la fuerza que tenía mi ego en el otro lado; de igual forma me empecé a sorprender con las historias que me contaban mis amigos acerca de cómo han engañado a sus esposas durante alguna aventura sexual. Recuerdo que viajando en carretera, interesante circunstancia que siempre nos invita a conversar, un amigo me platicaba alguna noche de juerga donde llegó hasta altas horas de la madrugada con su esposa.
Ella le preguntó con quién había estado y él contestó que con nadie en específico. Luego la esposa le presentó evidencias por las que ella sospechaba que salía con otra persona, a lo que mi amigo comentó: " .. .lo que te digo es lo que es. Tú cree lo que quieras". ¡Caray! Qué fuerte puede ser el ego donde frente a la cristalina evidencia (máximo grado de verdad) aún puede negada para mantener una "imagen", aún puede mentir al grado del absurdo. Así de poderoso podemos hacer a nuestro ego a través de la mentira. Y las consecuencias paralelas de estos relatos es que yo, mientras escuchaba, me preguntaba si a mí no me mentiría algún día también. La gente no se da cuenta de que en sus relatos de aventuras sólo muestra su verdadera identidad y lejos de sentir camaradería quizás estén sembrando la desconfianza.
Pasaron los meses y sí, efectivamente, también esa persona a mí me mintió, y por supuesto que me hirió (bueno, a mi ego). A una persona así cuando la conocemos e identificamos como mentirosa la tendemos a rechazar, a alejamos de ella. El ego vuelo ve a hacer de las suyas favoreciendo la separación. E mensaje vuelve a ser claro: La mentira nos separa; la verdad nos une. Así de simple.
En mi experiencia, la elección de un sendero espiritual fue algo que se sucedió poco a poco y casi sin dar me cuenta sino hasta que ya estaba ahí. La luz fue entrando paulatinamente. De modo gradual se volvió intolerable para mí vivir con las mentiras, incluso hoy el día sufro cuando intento decir alguna mentira "piadosa" Hoy no puedo. Me siento tan mal tan sólo de pensar que llevada a la acción concreta ya es inoperante para mí. No todos mentimos. Hay gente que ha llegado a una evolución tal que lleva años sin necesidad de mentir.
Debo confesar que para llegar a este "grado de decir la verdad", al principio se aterroriza el ego y no nos deja fácilmente. Pero luego, cuando aprendí a dominarlo poco a poco, con una Nueva Conciencia de mi espiritualidad, cuando empecé a creer que soy un ser divino, a igual que cualquier otra manifestación de la creación al igual que cualquier otra persona, empecé a optar por cada vez más verdad en mi vida. Esa verdad la empecé a experimentar como una liberadora sensación en m continuo andar. Cada vez que optaba por decir la verdad me sentía placenteramente libre. Así entendí lo que dacia el apóstol San Juan 8:32: "La verdad os hará libres".
La verdad te hace libre porque ya no estás centrado en tu ego, ya no estás atrapado al pendiente de ti mismo preocupado por el tipo de imagen que estás proyectando o protegiendo. Es cuando te das cuenta de que ere: más, mucho más, que tu imagen. Cuando vivas en este grado de verdad al que te estoy invitando, al principio te sentirás tan extraño que no creerás ser parte de este mundo. La esencia de la mentira es que alguien quiere mantener su imagen, su yo falso, por miedo a ser rechazado. Tú te darás cuenta y con amoroso silencio quizá le digas que está bien, que no importa. Pero tú sabes que miente. Verás a esas personas como lejos de ti, de otro mundo, pero al mismo tiempo podrás percibirlas, irónicamente, tan parte de ti en su esencia de verdad pero que ellos mismos no se han dado cuenta de que la tienen y tú sí. Por eso, quizá la separación de estas personas sea momentánea, mientras te alcanzan en el lugar donde la verdad nos hace libres, y ahí se suceda un reencuentro. Todos vamos hacia allá, poco a poco, cada quien a su paso.
Stuart Wilde en su libro Whispering Winds ofChange ("Los susurrantes vientos del cambio") expresa con gran sabiduría lo que te he querido comentar aquí:
A lo largo de los años, al aumentar tu energía espiritual, las mentiras pasan de construir una parte de tu vida cotidiana a ser tristes necesidades, luego a experiencias desagradables, cargas en extremo dolorosas, para librarte de las cuales harás lo que sea. Si has emprendido la senda espiritual sabrás a lo que me refiero es la trascendencia es en parte el proceso de pasar de la falsedad a lo real.
A lo largo de los años, al aumentar tu energía espiritual, las mentiras pasan de construir una parte de tu vida cotidiana a ser tristes necesidades, luego a experiencias desagradables, cargas en extremo dolorosas, para librarte de las cuales harás lo que sea. Si has emprendido la senda espiritual sabrás a lo que me refiero es la trascendencia es en parte el proceso de pasar de la falsedad a lo real.
Si esto lo hubiera leído hace diez años ni lo hubiera entendido y por lo mismo no lo hubiera creído. Hoy vibro con cada una de sus palabras porque así, exactamente así, lo he sentido. Confío en que si tú has optado por el verdadero éxito en la vida, es decir, si has optado por recorrer tu senda espiritual, tendrás una experiencia muy parecida a la de Stuart o yo o la de tantos otros. Comenzarás a sentir como muy pesada a la más ligera y pequeña mentira. Ahí tendrás otra manifestación donde tu yo espiritual está venciendo a tu ego.
Continuará
Continuará
Del Taller de Autoestima de Juan Carlos Fernández. Capítulo 291 Volumén 2: Salir de las sombras del Ego