Superar una depresión


Quien ha pasado alguna vez por este trance sabe que superar una depresión no es algo fácil. Si estás pasando por esto y no ves la salida, puedes echar mano de algunos de los consejos que te vamos a dar aquí. Si a pesar de intentarlo no te ves con fuerza para ello deberías visitar a un especialista, sobretodo si tienes pensamientos autodestructivos. Un buen profesional puede ayudarte mucho a salir del pozo.

No dudes en pedir ayuda si crees que tú solo no puedes conseguirlo. En primer lugar es básico saber reconocer que tenemos un problema y no siempre somos conscientes de estar padeciendo una depresión. A menudo ni siquiera las personas más cercanas son conscientes de nuestro problema ya que están acostumbrados a vernos así  o están demasiado ocupados con su propio estrés y problemas para darse cuenta de lo que nos ocurre.

Si alguien te lo ha comentado ya, no te enfades con esa persona, sin duda te quiere. Te quiere lo suficiente como para darse cuenta de tu problema y para decírtelo, no todos son valientes para enfrentarse a quienes tienen problemas. Ese es un buen motivo para ser feliz y disfrutar de la vida, tienes gente que te quiere. Si quieres otros puedes echarle un ojo a nuestro vídeo: cómo ser feliz y disfrutar de la vida. La vida es el mejor motivo para salir de una depresión.

La depresión es todo aquello que acompaña a una situación en la que nos sentimos atascados. Nos encontramos atrapados ante una serie de problemas o una vida que no nos parece satisfactoria y no sabemos cómo salir de esta situación o solucionar nuestros problemas. Pero ojo, eso no es todo. No solo es necesario que no sepas cómo solucionar tus problemas sino que hayas dejado de buscar la solución, si te has rendido, si crees que todo lo que te pasa es así y tiene que seguir siendo así, muy probablemente atravieses una depresión.

Acompañan a la depresión la apatía, la tristeza y la melancolía y las nulas ganas de hacer nada para cambiar esto. Cuando ya has perdido toda la esperanza y te has rendido por completo es cuando llega la depresión. Salir de ella implica encontrar nuevas fuerzas para recuperar la esperanza y volver a luchar por solucionar la situación. Superar una depresión no significa que tus problemas vayan a eliminarse ni que tu vida sea mejor de lo que lo es ahora, pero sin duda tener ganas de vivirla y de encontrar soluciones a los problemas es un primer paso para librarte de ellos.

Además muchos de los problemas que ahora tienes desaparecerán junto a la depresión, los superarás o dejarás de darle importancia a cosas con las que ahora no puedes.

¿Has escrito alguna vez un diario? Hacerlo te enseña de niño cómo los problemas que hoy te parecen imposibles de superar mañana te parecen una tontería. Y no me refiero a un mañana hipotético, no. Mañana en el sentido literal. Lo que hoy escribes y mañana relees se relativiza de una forma sorprendente y a menudo es la mejor idea para quitarle importancia a los problemas.

Si nunca has escrito un diario pruébalo ahora pero trata de que sea constructivo. Utilízalo para explicar cómo te sientes y enumerar tus problemas buscando una solución, puedes ir revisando tus escritos y las propuestas que te hacías para solucionar los problemas y comprobar si lo estás haciendo bien.

Que tengas problemas que ahora te parecen complicados de solucionar no quiere decir que sean imposibles, como digo la perspectiva del tiempo ayuda a poner las cosas en su lugar. Si ahora lees algo de hace unos meses y ya no es un problema, con lo que te llegó a agobiar, puedes tratar de aplicar la misma lógica a los problemas que tienes ahora. Tomar aire para buscar otro tipo de soluciones es necesario y escribir puede ayudarte a ver mejor las cosas.

Insisto, que no veas la solución a tus problemas no significa que no exista. Puedes, tienes que, probar cosas diferentes e insistir hasta que lo consigas. No te rindas.

Si te cuesta esfuerzo hacer las pequeñas cosas de cada día, si no sales de casa por el agobio con el que vives haz que esa sea tu primera meta.

Oblígate cada día a arreglarte, no como si fueras a una boda pero sí como si tuvieras que estar con más gente. No te quedes en casa en pijama o ropa cómoda. Péinate, aséate, aféitate o depílate, no dejes crecer las raíces del pelo ni comas todo lo que te apetezca. Empieza por cuidarte y tratar de tener una buena apariencia día a día.

Haz lo mismo con tu casa. No dejes que la suciedad y el desorden puedan contigo. El ambiente donde vives se refleja en tu estado de ánimo así que aprovecha que no tienes demasiadas ganas de estar con gente para hacer limpieza de tu casa. Tira todo aquello que no uses. Y aprovecha para salir a la calle bien arreglado, aunque sea para tirar la basura.

Ponte metas día a día. No mires mucho más allá del día presente y del día siguiente. Cada pequeña cosa que consigas celébrala, felicítate, tú sabes cuánto te cuesta conseguirlo.

Trata de no perder tu vida social, llama a tus amigos y haz algo con ellos aunque no te sientas la alegría personificada. No te exijas mucho, no te castigues si las cosas no te salen bien.

Para obligarte a salir de casa si no lo tienes, puedes adoptar a un perro. Tendrás que sacarle varias veces al día y te hará compañía. Verás como tener una responsabilidad o una obligación te hace ver las cosas de otra manera.

Por último, trata de relativizarlo todo y acepta que no siempre conseguimos lo que deseamos. A menudo las cosas son así y así hay que aceptarlas. Sin más. Es normal que algunas de ellas te duelan y te den rabia pero trata de pasar por alto todo lo negativo y quedarte con lo positivo.

Juega contigo mismo y rétate a encontrar cosas positivas y a ignorar deliberadamente a las negativas. Compite por encontrar cada día más cosas positivas que el anterior. Saca algo positivo de cualquier rincón, hasta que te parezca divertido, llegará un momento en que no tendrás que esforzarte por hacerlo. Hacer esto puede cambiar tu estado de ánimo. Oblígate a sonreír y verás como haciendo las dos cosas, aunque parezca imposible, lo conseguirás día a día.

Ser feliz depende de ti, la felicidad está en el interior de cada uno y la fuerza para superar una depresión tiene mucho que ver con todo esto. Si quieres conocer una historia de superación y la recompensa a la búsqueda de la felicidad no dejes de ver nuestro vídeo cómo ser feliz y disfrutar de la vida del que sacarás muchas conclusiones positivas.