"Algunas personas prefieren abandonar el planeta antes que cambiar
John Lenon
|
Cuando la mayoría de las personas piensan en que mejore su vida, lo relacionan a que desean que cambie «otra persona», ¿verdad? Cuando hablo de «otra persona» incluyo al gobierno, a las grandes empresas, al jefe, a los compañeros de trabajo, al gobierno, a los extranjeros; también me refiero a la escuela, el cónyuge, la madre, el padre, los hijos, etcétera, es decir, a todo el mundo excepto uno mismo. No queremos cambiar, pero queremos que todos los demás cambien para que nuestra vida sea diferente. Y sin embargo, como es lógico, cualquier cambio que deseemos que se dé en nuestra vida tiene que provenir de nuestro interior. No podemos cambiar a otros, nuestra única responsabilidad es sobre nosotros mismos.
Cambiar significa liberarnos de los sentimientos de aislamiento, separación, soledad, rabia, temor y dolor; significa crearnos una vida llena de paz, en donde podamos relajarnos y disfrutar de las cosas tal como se nos presentan sabiendo que todo va a ir bien. A mí me gusta emplear la afirmación siguiente: «La vida es maravillosa; todo está bien en mi mundo, y siempre avanzo hacia un bien mayor». De esa forma no importa qué dirección tome mi vida porque sé que va a ser maravillosa. Por lo tanto, puedo disfrutar de toda suerte de circunstancias y situaciones.
A veces podemos cambiar totalmente una situación si alteramos un poco nuestro pensamiento. ¿Te puedes imaginar el cambio como hacer la limpieza de la casa interior? Si limpias las habitaciones sin prisas, una detrás de otra, finalmente todas estarán limpias. Pero no es necesario haberlo hecho todo para comenzar a ver los resultados. Cambia aunque sea sólo un poco y veras cómo muy pronto empiezas a sentirte mejor.
Muchos esperan con ansia el año nuevo, que comience un nuevo ciclo y lo malo y difícil que se quede atrás, pero necesitamos comprender que no se va a producir ningún cambio en la vida de nadie por el simple hecho que termino un año más. La única forma de cambiar es estar dispuestos a entrar en el interior y efectuar el cambio.
Existe la costumbre de hacer buenos propósitos cuando empieza un año, pero muy pronto se abandonan porque no van acompañados de ningún cambio interior, está basados en premisas de “tener qué”, en lugar de “desear qué”. «No volveré a fumar», dice alguien. De entrada, esta frase es negativa y no le dice al subconsciente lo que ha de hacer. Esta persona podría decir mejor apoyarse en una afirmación positiva como: «Todo deseo de cigarrillo me ha dejado y estoy libre».
El principio metafísico “Lo que es adentro, es afuera”, nos da luz de ver el espejo de nuestro interior viendo nuestro exterior: ¿Como son tus amigos?, ¿la actitud de la gente cercana a ti?, ¿las circunstancias que vives? Todo ello son reflejos de tu interior. Mientras no hagamos cambios interiores, mientras no estemos dispuestos a hacer el trabajo mental, nada en el exterior cambiará. Sin embargo, los cambios interiores pueden ser increíblemente sencillos porque lo único que verdaderamente necesitamos cambiar son nuestros pensamientos y emociones ¿Qué puedes hacer de positivo por ti este año que no hiciste el año pasado? Tómate un momento y piensa en esta pregunta. De aquello a lo que tanto te aferraste el año pasado, ¿qué te gustaría liberar este año? ¿Qué te gustaría cambiar en tu vida? ¿Estás dispuesto a hacerlo?
Hay muchísima información disponible que te proporcionará algunas ideas una vez que estés dispuesto a cambiar. Es notable cómo el Universo comienza a ayudarte en el momento mismo en que tú te declares dispuesto a cambiar. Te ofrece lo que necesitas: un libro, una cinta, un maestro, un amigo incluso que te hace un comentario de pasada que para ti adquiere de pronto un profundo significado. A veces las cosas empeoran antes de mejorar, y eso está bien porque quiere decir que se está iniciando el proceso. Los viejos hilos comienzan a desenredarse, de modo que deslízate con ellos. No te asustes ni pienses que tus esfuerzos no dan resultado. Sencillamente continúa trabajando con tus afirmaciones y las nuevas creencias que estás sembrando.
Del Taller de Autoestima de Juan Carlos Fernández. Capítulo 126 Volumén 2: Cambio y Sanación