Un aspecto particular de la fortaleza mental es tomar la decisión de si tendrás o no una buena vida. Hay muchos niveles de fortaleza mental y todos son necesarios para ser exitoso y feliz. El área en particular que tiene mayor impacto es la de la fuerza emocional.
Las emociones son, por supuesto, una parte de nuestra psique, pero que puede distinguirse del resto de nuestras cualidades mentales porque son las que influencian más directamente nuestro cuerpo físico. Afectan la manera en que nuestro cuerpo funciona y dirigen cada una de nuestras acciones. Sin emoción no tendríamos razones de actuar ni hacer nada con nosotros mismos.
Las emociones son nuestros más grandes motivadores. Desafortunadamente pueden motivarnos a actuar en cualquier dirección, incluso en la errónea. Por esta razón, la fuerza emocional es esencial. Hay incontables situaciones en las que la gente emocionalmente fuerte evita y muchas acciones que nunca llevan a cabo. Aquí hay 15 de ellas:
1. No ruegan atención
Necesitar atención está directamente ligado a la emoción. Los que necesitan reconocimiento sólo se topan con la experimentación de sentimientos de valor cuando otros los hacen sentir necesitados; es como si estas personas estuvieran inciertas de su valor propio. Sentirte inseguro sobre tu valor es una profecía que se cumplirá; si no sabes que importas, entonces nadie lo creerá nunca.
2. No permiten que otros los hagan sentir mal
La fuerza emocional requiere resistencia. Este mundo está repleto de trolls y haters. Son ojos celosos que rondan cada esquina. La desafortunada verdad es que quienes nos detienen casi siempre son las personas más cercanas. Deshacerte de gente así es casi siempre la mejor solución, pero también la más difícil. Si pueden eliminar poco a poco a estas personas evitarás que la separación desate una reacción muy emocional.
3. No son rencorosos
Si guardas rencores entonces una situación te importa mucho más de lo que debería. Si una persona se disculpa genuinamente, perdónala. Si esta persona no lo hace, no interactúes con ella, pero no le guardes rencor. La gente que buscas aislar y odiar requieren demasiado tiempo y energía mental, te hace más daño que bien.
4. Nunca dejan de hacer sus cosas
Los individuos emocionalmente fuertes hacen lo que hacen porque aman hacerlo. No planean bajar el ritmo o detenerse por cualquiera que vea su felicidad como inapropiada.
5. Nunca dejan de creer en sí mismos
Aquellos que se aman y entienden a sí mismos, quienes no se tienen miedo y están orgullosos de sí mismos, nunca dudan. Tú mismo creas tu propio valor.
6. No actúan como pe***s ni oj***s
La gente es mala onda. Pero ¿por qué? Ser un cabrón sólo sirve como un factor de intimidación y si eso es lo que intentas más vale que tu profesión sea de negociante. Sí sólo lo haces porque sí, obviamente estás intentando compensar tu falta de seguridad. ¿También conduces un coche muy grande? Escuché que hay pastillas para eso.
7. Saben a quién dejar entrar a sus vidas
Los emocionalmente fuertes lo son por una razón: no se exponen a personas que tiran sus defensas y destruyen su moral. La mayor parte del mundo está perdido y con gusto te arrastrará con ellos. No dejes que un conocido terrible arruine tu felicidad.
8. No tienen miedo de amar
Si tienes miedo de amar, no tienes la suficiente confianza en ti mismo. Obviamente crees que no puedes estar en una relación que dure, sino en una que esté destinada al desastre. No quieres que te lastimen de nuevo porque que algo te duela es horrible. No hay razón por la que te rompan el corazón de nuevo porque eres increíble. Si las cosas no funcionan, no es por ti. Es por los dos. A menos, claro, que seas un ser humano terrible, en ese caso sí eres tú.
9. No se quedan en cama con terror de lo que les espera en el día
La mejor parte de tu día debería ser cuando despiertas y te das cuenta que sigues vivo. Tomamos nuestra vida por hecho con demasiada regularidad.
10. No tienen miedo de bajar el ritmo
La gente emocionalmente fuerte no tiene la necesidad de acción y emoción constante. No necesitan corretear todo el día y seguir en movimiento para evadir sus demonios. Aprecian un momento más lento porque loa cerca a lo que se siente hacer nada más que vivir y respirar. Eso no quiere decir que no disfruten la emoción en la vida, pero no son adictos a ella y están perfectamente contentos con salir a dar la vuelta y oler flores.
11. No hacen cosas que no quieren
Todos hacemos cosas que no nos encantan, pero nunca deberíamos hacer cosas que no queremos hacer. Los emocionalmente fuertes entienden eso y encuentran la manera de concentrarse en lo que aman, lo que les permite entender lo que necesitan hacer para hacer lo que aman. Aunque probablemente no amen cada segundo, les gusta darlo porque los acerca a hacer lo que en realidad quieren hacer.
12. No tienen problema con decir que no
Si no puedes decir “no” abusarán de ti. Serás considerado alguien fácil de manipular y nadie te preguntará tu opinión ni te tomará en serio. Decir “no” le recuerda a la gente que no tienen control sobre ti.
13. No se les olvida la filantropía
No estamos demasiado ocupados para donar nuestro tiempo o dinero. Tampoco se nos olvida. Algunas personas sólo eligen ignorar sus responsabilidades como seres humanos. Mientras más emocionalmente fuerte seas, más apreciarás a otros y a la vida misma. Valoras más la vida y empatizas con quienes no la tienen fácil.
14. No sienten necesidad de pertenecer
A medida que seas más fuerte, serás más independiente. No tendrás la necesidad de pertenecer porque perteneces a donde importa: el mundo. La gente que forma grupos sociales más pequeños con frecuencia es torcida y poco sana. Querer pertenecer significa en otras palabas “tengo miedo de ser yo.”
15. No olvidan que la felicidad es una decisión
Lo más importante es que la gente emocionalmente fuerte ha aprendido a entender el poder que tiene su cerebro sobre su mente y su cuerpo. Entienden que las emociones son reacciones, no reacciones a causas directamente físicas, sino a la manera en que percibimos esas causas. En otras palabras, nuestras emociones no reflejan la realidad, sino la manera en que la interpretamos. Entender esto nos da control de nuestras emociones y en consecuencia, de nuestras vidas.
Este texto es una traducción tomada de Elite Daily.