Culpar, criticar, señalar errores y quejarse son todas formas de negatividad. Todas traen muchos conflictos. Con cada pequeña queja y por cada momento en que criticas algo, estás dando negatividad. Las quejas sobre el tiempo, el tráfico, el gobierno, tu pareja, tus hijos, tus padres, las largas filas, la economía, la comida, tu cuerpo, tu trabajo, los clientes, los negocios, los precios, el ruido o el servicio parecen pequeñas cosas inofensivas, pero traen de vuelta consigo una cantidad enorme de negatividad.
Elimina de tu vocabulario palabras como terrible, horrible, repugnante y espantoso, porque cuando dices estas palabras, vienen con sentimientos fuertes. Cuando las dices deben regresar a ti, ¡lo cual significa que estás poniéndole esas etiquetas a tu vida! ¿No crees que sería una buena idea usar más palabras como fantástico, fenomenal, fabuloso, brillante y maravilloso?
Puedes tener todo lo que amas y quieres, pero tienes que estar en armonía con el amor, y eso quiere decir que no hay excusas para no dar amor. Las excusas y justificaciones te impiden recibir todo lo que quieres. Te impiden tener una vida fenomenal.
"Todo lo que enviamos a las vidas de los demás regresa a la nuestra".
Edwin Markham
El Poder- Rondha Byrne