¿Por qué se practican los abortos? Éstos se originan por apego a la propia existencia o a los propios placeres. La mujer aborta porque piensa que, si le nace un hijo, ya no podrá dedicarse más a entretenimientos, o que su amigo no se casará con ella, o que con la aparición de un hijo la vida será insoportable. En todo caso, no son más que razones egoístas.
Pero el karma, como contrapartida de lo realizado, volverá inevitablemente a esa mujer. El karma del aborto puede volverle de dos maneras. En el primer caso, tendrá a su lado un hombre de deseos sexuales muy fuertes. La mujer tendrá con él relaciones sexuales, pero ese hombre la abandonará movido por su propio egoísmo. En el segundo caso, las relaciones con una persona egoísta durarán mucho y ella tendrá que experimentar el dolor que el egoísmo puede causar a la gente.
De "No permitan que las falsas doctrinas les engañen. El mundo de S. Asahara, parte 4".