Si no haces nada para estar sano, al menos haz estas 5 cosas...



Ok. Estás ocupado. Lo entiendo. Entre el trabajo, los amigos, la familia y la vida, cuidar de ti mismo está en la parte inferior de tu lista de prioridades. Lo escucho todos los días de amigos, familiares, e incluso de mí misma en alguna ocasión.

Pero déjame preguntarte esto: 
-¿Cuánto tiempo te está costando NO cuidar de ti mismo?
– ¿Cuántos minutos has pasado con la mirada perdida en la pantalla de tu computador porque tu energía colapsó?
– ¿Cuántas horas eres un zombi durante el día porque te quedaste hasta las 2am navegando en internet?
– ¿Cuánto tiempo se pierde en citas médicas porque te enfermas todo el tiempo y no sabes por qué?

Suma todo y dime en los comentarios cuánto es. Puede que no sea un número bonito.

Aquí está cómo simplificar tu autocuidado:

1. Si no haces nada, haz el sueño una prioridad. No es coincidencia que haya hecho éste el número uno de la lista. El sueño podría ser la única gran pieza que faltaba a tu rompecabezas de la salud (y en tu puzzle de control de peso, de hecho). La deprivación del sueño altera nuestras hormonas del hambre y el estrés, haciéndonos propensos a consumir en exceso alimentos ricos en calorías con mucha azúcar, carbohidratos refinados y grasas. El alza de la energía de estos alimentos desaparece rápidamente, dejándonos depletados y más cansados que antes.

2. Cuando elijas alimentos, piensa eficiencientemente. Comer alimentos que te nutren es tu mejor defensa contra pérdidas de tiempo como energía baja y enfermedades frecuentes. Elegir alimentos que te dan el mayor aporte nutricional significa que pasas menos tiempo comiendo y por consecuencia tienes más tiempo. Alimentos ricos en nutrientes como los granos enteros, las frutas y verduras, y los frijoles le dan a tu cuerpo lo que necesita con menos. Haz que tu prioridad sea elegirlos primero, siempre que sea posible, en lugar de perder el tiempo con opciones que te dejan con hambre una hora después y buscando más comida.

3. Incluso si estás exhausto, levántate 10 minutos y toma un paseo alrededor de la cuadra. ¿Te duele la espalda? ¿Miras fijamente la pantalla de tu computador por un largo tiempo (sin trabajar)? ¿Sientes el estómago un poco raro? Una vez que identifiques la “alarma” de tu cuerpo, escúchala! Darte estos pequeños descansos cortos de movimiento cuando el cuerpo te lo pide es una forma rápida de evitar el desgaste y reducir el estrés.

4. Tómate 20 minutos a la semana para planificar tus comidas. Lo sé, lo sé: ¿Quién tiene tiempo para planificar? Dos pequeñas cosas harán una gran diferencia en qué tan bien comes y si mueves tu cuerpo o no: (1) Usar tu calendario, y (2) Tomar 20 minutos a la semana para planificar tus comidas. Escribe los entrenamientos, el tiempo de las comidas, y el tiempo de cocción en tu calendario. Es un cambio increíble, te lo prometo, y al fin de cuentas definitivamente te ahorrará tiempo. 

5. Utiliza la técnica de respiración 4-7-8. No hay nada más curativo que usar una herramienta que tienes contigo todo el tiempo: la respiración. Una de mis favoritas es la técnica de respiración 4-7-8, una manera increíble de refrescar tu cuerpo y mente en cualquier lugar. Así es como funciona: Respira por la nariz contando hasta 4. Aguanta la respiración hasta la cuenta de 7. Exhala con fuerza por la boca (como si estuvieras inflando un globo) hasta la cuenta de 8. Repite ese ciclo 3 a 4 veces. Eso es todo. Sólo toma unos minutos y bajará tu nivel de estrés, y subirá tu sentido de bienestar, casi al instante.

Haz estas cinco cosas y goza de una mejor salud.


Fuente en Inglés: Mind Body Green

Traducción: Empodera Salud